La intolerancia es una de las grandes enemigas de la humanidad.  Una muestra de sus consecuencias, son las guerras y las peleas sin sentido.  El pasado fin de semana un individuo enojado por el servicio que le dieron en un Burger King localizado en la ciudad de Wyoming, golpeó salvajemente a dos muchachas que trabajan en el lugar.  El individuo saltó al otro lado del counter tiró todo lo que pudo al piso y golpeó y pateó a los jóvenes. Una buena sentencia para un individuo así, es ponerlo a limpiar el lugar todos los días durante al menos tres meses y después dejarlo en la chirola por siete más.  Y si se porta mal, meterlo en chirola y tirar la llave al lago.

 

Volvieron los estudiantes a la escuela Uvalde de la ciudad del mismo nombre en Texas. Muchos se reúsan a seguir estudiando por el trauma que sufrieron por la masacre perpetrada por un joven con un arma de guerra.  Las autoridades de la escuela tomaron estrictas medidas de precaución para mantener seguros a los estudiantes.  ¡Muy Bien!  O pero el Congreso aún no ha prohibido la venta de esas armas que no sirven para cacería, sino para matar seres humanos, y en este caso, niños.

¡Qué vergüenza!

 

Una juez tiró abajo la ley de 1931 que penalizaba indiscriminadamente el aborto.  ¡Bien! Porque no es posible que se pretenda aplicar en el 2022 una ley de casi un siglo.  Si el aborto necesitara algunas regulaciones, no es con una ley de las cavernas que se va a lograr.  Hay que ser tarado para pretender eso.

 

Saliendo del patio, en Chile, perdió la propuesta de una nueva constitución.  Algo bastante raro, pues si Boric, un cabeza caliente del estudiantado ganó las elecciones ¿Cómo es posible que una constitución elaborada durante una de las dictaduras más sangrientas de la historia fuera apoyada por los votantes? Ese cuento, o es más corto o es más largo.

Probablemente los simpatizantes del cambio se durmieron sus laureles y pensaron que tenían el terreno ganado.  ¡Perdieron vergonzosamente!

 

En tanto, en Perú, continúa gestándose un golpe de estado judicial, lo cual es la nueva forma de la derecha deshacerse de los gobiernos que no les sirven a sus intereses económicos y geopolíticos. Recordemos la destitución de la presidenta de Brasil, Dilma Rousseff en el 2016, la descalificación de Lula Dasilva para poder subir al poder subir a Jair Bolsonaro, y el golpe de estado en Bolivia para destituir a Evo Morales.

La técnica consiste en crear supuestas evidencias de corrupción, repetirlas muchas veces en los medios y destituir a los mandatarios.

Esperemos nuevas acusaciones contra Pedro Castillo, contra Javier Boric de Chile, Luis Arce en Bolivia, contra Alberto Fernández y Cristina Fernández en Argentina.  También contra el presidente de El Salvador, Nayib Buquele y contra la presidenta de Honduras, Xiomara Castro.  ¡No cambien de canal!

 

La misma tónica se aplicó en Ucrania en 2014.  Acusaron al presidente de Corrupción, le hicieron una campaña publicitaria en su contra que, según admitió la encargada del pentágono en el hemisferios, costó cerca de 6 mil millones de dólares. ¡Por la plata baila el mono!

 

Nos vemos en los próximos Jalapos, si la Virgencita lo permite.