Ciudad de México, 28 jun (Prensa Latina) El presidente Andrés Manuel López Obrador advirtió sobre las consecuencias del tráfico de personas al confirmar hoy que 50 migrantes murieron asfixiados en un tráiler en la ciudad de San Antonio, estado norteamericano de Texas.
«Hasta ahora son 50 los fallecidos: 22 de México, siete de Guatemala, dos de Honduras y 19 todavía sin información sobre su nacionalidad», dijo el mandatario durante su conferencia matutina.
López Obrador, el enviar sus condolencias a los familiares de las víctimas, señaló que se trata de un “tremenda desgracia».
El gobernante informó que personal del consulado de México en Texas (sur de Estados Unidos) se encuentran en la zona para apoyar la investigación.
«Estaremos atentos para apoyar a los familiares de las víctimas, el traslado de los cuerpos y desde luego hacer la investigación en lo que a nosotros corresponde”, subrayó.
El jefe de Estado lamentó hechos como estos que “desde luego tienen que ver con la situación de pobreza, de desesperación, de hermanos centroamericanos, de mexicanos” y que suceden porque también “hay tráfico de personas y falta de controles en este caso, en la frontera de México con Estados Unidos y al interior” de esa nación.
Anoche las autoridades estadounidenses dieron a conocer a el hallazgo de 46 muertos en un camión abandonado y explicaron que otras 16 personas fueron hospitalizadas, 12 adultos y cuatro niños.
Los primeros informes indicaron que al parecer las víctimas perecieron a causa del calor. «Los pacientes que vimos estaban calientes al tacto (…) no hay señales de agua en el vehículo ni de aire acondicionado visible que funcione en el interior», comentó un funcionario.
El Departamento de Bomberos de San Antonio explicó que las víctimas sufrieron lesiones como insolación y agotamiento.
Tres personas fueron arrestadas luego del mortal descubrimiento, pero no está claro si están «absolutamente conectadas con esto o no», enfatizó el jefe del Departamento de Policía de San Antonio, William McManus.
Por su parte, el gobernador republicano de Texas, Greg Abbott, responsabilizó al presidente Joe Biden por estas muertes, debido a sus “letales políticas de fronteras abiertas».
El Departamento de Seguridad Interior de Estados Unidos lidera la investigación federal sobre el trágico incidente, ocurrido cerca del cruce de Cassin Drive y Quintana Road, de acuerdo con el diario The Texas Tribune.
Este lunes, las temperaturas en la zona del suceso alcanzaron los 39,4 grados Centígrados.
