Por Edith Reyes
GRAND RAPIDS, MICHIGAN (EVH)- La reciente escasez de fórmula para bebés ha afectado a muchos infantes en los Estados Unidos, muchas Madres, desesperadas por no encontrar comida para sus bebé, viajan muchas millas a las tiendas con la esperanza de encontrar el alimento tan necesario para el crecimiento y desarrollo de éstos, solo para volver a casa con las manos vacías. La escasez comenzó desde que se detectó el COVID-19, lo que afectó la producción masiva de estos alimentos y ahora se agrega a la crisis el retiro del mercado de miles de unidades de fórmulas para los infantes donde se encontraron bacterias que causan daños a la salud de los niños
Similac, una fórmula para bebés de uso común, fue retirada después de detectarse que contenía la bacteria Cronobacter, que provoca en los bebé una infección o meningitis (una inflamación de las membranas que protegen el cerebro y la columna vertebral) potencialmente mortal. Algunos síntomas pueden incluir mala alimentación, irritabilidad, cambios de temperatura, ictericia neonatal, respiración entrecortada o movimientos corporales anormales.
Se han detectado cuatro casos los cuales ocurrieron entre septiembre de 2021 y enero de 2022, causando dos muertes y varias hospitalizaciones, después de detectar muestras positivas de bacterias raras y muy peligrosas en algunas áreas de la planta de Abbott, la Administración de Drogas y Alimentos de los Estados Unidos (FDA) cerró la instalación y Abbott anunció un retiro masivo de su fórmula el 17 de febrero.
Abigail Bishop, dietista y supervisora del Programa de Mujeres, Bebés y Niños (WIC), un programa de protección y recursos para madres del Departamento de Salud del condado de Kent, habló con El Vocero Hispano para asesorar a los padres sobre lo que no deben hacer y dónde pueden encontrar más información en casos de que no puedan encontrar la fórmula para su hijo o en casos extremos no hallar ninguna.
“Enfatizamos mucho con nuestras familias, que ser mamá, tener un bebé por lo general es estresante y produce mucha ansiedad y miedo, y si también se le suma la escasez de fórmula”, “No sabes a dónde ir o qué hacer, el programa WIC está disponible para orientar y ayudar a las familias con diferentes opciones a pesar de las limitaciones del programa.”
Asimismo manifestó, que el programa WIC ha estado ampliando las opciones para las personas con estas necesidades o de los productos que normalmente no calificarían a través del programa. Las personas ahora pueden comprar una lata de mayor tamaño para un tiempo determinado y obtener fórmulas de otras marcas de la tienda en lugar de una específica.
Los padres pueden cambiar por otras marcas de fórmulas sin problemas si el bebé está sano y tolera una fórmula estándar. Si un bebé necesita algo más específico, Bishop aconsejó buscar una fórmula con los mismos ingredientes y consultar con su pediatra sobre las posibles alternativas para sus hijos.
“Es posible que al bebé le lleve tiempo hacer el cambio, es posible que no le guste de inmediato, puede que le dé un poco de gas, pero dele a su bebé algo de tiempo para adaptarse a las fórmulas”, dijo. “Si en algún momento, durante los cambios, tienen inquietudes, siempre deben consultar con su pediatra. Es muy importante mantener esa comunicación abierta para que el médico sepa lo que está pasando”.
Muchas madres han estado expuestas a una receta "haz tu propia fórmula" que ha estado dando vueltas en las redes sociales, afirmando que esta podría ser una alternativa si no encuentra la fórmula para tu bebé, Bishop dijo que esto no es seguro y puede ser riesgoso.
“Mucha gente dice, bueno, los usaron en el pasado y funcionaron, pero sí, los usaron en el pasado, pero aún había riesgos para los bebés”, dijo. “La FDA tiene pautas nutricionales realmente específicas para fórmulas infantiles, y no son pocos. Hacer tu propia fórmula podría ser no un alimento balanceado para los infantes”
Agregó que preparar su propia fórmula puede contener más potasio, que los órganos, los riñones o el hígado de algunos bebés no pueden tolerar, agregar agua extra a la fórmula también puede ser peligroso para los bebés, ya que puede contener niveles bajos de sodio en la sangre, lo pudiera requiere una posible hospitalización.
En las últimas semanas, el gobierno importó suministros extranjeros y utilizó la Ley de Producción de Defensa para acelerar la producción nacional de fórmula infantil. Pero esos pasos no comenzaron hasta mediados de mayo y los minoristas comenzaron a racionar los suministros y los estantes de las tiendas se estaban vaciando. La Casa Blanca anunció que la próxima semana comenzará la tercera y cuarta ronda de envíos de fórmula desde el extranjero, del productor Kendamil en Gran Bretaña y de Bubs Australia.
Los envíos llevarían la fórmula Kendamil desde el aeropuerto de Heathrow en Londres a los aeropuertos de Estados Unidos durante un período de tres semanas, a partir del 9 de junio. Los vuelos transportarán alrededor de 3.7 millones de botellas en cantidades de 8 onzas, enviadas sin cargo por United Airlines. Las importaciones ayudarán, pero no pondrán fin de inmediato a la escasez de suministros que ha dejado a las personas que dependen de la fórmula a enfrentar límites en las compras o encontrar los estantes vacíos.
El programa WIC ofrece ayuda a las madres para saber qué tienda cercana ofrece su fórmula, lo que les permite hacer una llamada telefónica para verificar la disponibilidad en lugar de conducir a cada tienda. Junto con los recursos de fórmula para bebés, el programa también ofrece consejeros de lactancia, enfermeras y dietistas para ayudar a las madres a aprender y continuar amamantando.
Cualquiera que esté interesado en solicitar el Programa WIC, o esté interesado pero no esté seguro de si califica, llame al 616-632-7200. Para obtener más información sobre la escasez de fórmula para bebés, visite healthychildren.org. La información está disponible en español.
Con información de AP.
