Por Ramón Peralta
En estos días mientras la prensa dedica su total atención a la invasión rusa a Ucrania, totalmente diferente a como cubrió la de Iraq, los americanos dicen que ellos están sufriendo una “invasión” que no viene de los chinos, ni de lo rusos, sino del cono sur a través de la frontera con México.
Los datos de la “invasión” aparecieron recientemente en una encuesta que sobre el tema de la inmigración hizo la emisora pública (National Public Radio), conocida con las siglas de NPR. De acuerdo con los resultados de la encuesta, una gran mayoría, el 53% de los americanos, dicen que el país está sufriendo una “invasión” en su frontera Sur.
Las respuestas a la encuesta, por supuesto, varían de acuerdo con la afiliación partidaria. Un 76% de los seguidores del Partido Republicano sostienen como un hecho la “invasión”, mientras que entre los Demócratas es de un 41%. En los sectores sin afiliación política el porcentaje es de un 47%.
La mayor preocupación de los nativos, según la encuesta, es que la inmigración “sin control” representa un peligro para la nación, ya que, los que penetran lo hacen sin ser chequeado y por tanto, sin saber si son criminales o no. En ese sentido, la mayoría de los encuestados con filiación republicana consideran que la inmigración es el problema mas preocupante que enfrenta la nación, concordando con la idea de su “preclaro líder” Donald Trump.
Por otro lado, además del “peligro criminal”, una gran mayoría, esta vez también republicanos, atribuyen a los inmigrantes el aumento de las muertes por fentanyl, la peligrosa droga de extenso uso en la población americana y que, según ellos, penetra a través de la frontera con México.
Otro viejo argumento usado y que salió a relucir nuevamente en la citada encuesta es, que los inmigrantes son mas propensos a usar asistencia pública que los nativos aún cuando la mayoría de los inmigrantes que penetran ilegalmente no cualifican para recibir ayuda económica del gobierno federal. La vieja historia de que los inmigrantes vienen a quitarle el pan de la boca a los nativos carece totalmente de bases.
Todos estos argumentos hasta ahora expuestos han sido harto refutados. En lo que a la criminalidad se refiere, estudios tras estudios han demostrado que los inmigrantes poseen el mas bajo índice de criminalidad comparado con los demás grupos que componen la sociedad.
En cuanto a la penetración del fentanyl, las autoridades han comprobado que la mayor parte de esa droga penetra por los puertos de entrada, escondida en grandes camiones y vehículos de pasajeros. De manera que, los inmigrantes ilegales nada tienen que ver con dicho tráfico. Por otro lado, se ha comprobado que los llamados opioides, que solo el año pasado causaron alrededor de 100,000 muertes, son producidos por la poderosa industria farmacéutica americana pero no por inmigrantes.
Los expertos en el área atribuyen la percepción negativa de los republicanos sobre la inmigración no solo a su afiliación partidaria sino a las fuentes noticiosas donde acuden para informarse. La mayoría acude a fuentes ultraconservadoras y a la ya conocida Fox News, donde constantemente se lanzan todo tipo de falsas informaciones sobre la inmigración y sus efectos. Recientemente esos medios lanzaron la falsa información de que la administración Biden está llevando a cabo vuelos para trasladar inmigrantes desde la frontera hacia diversas comunidades con el objetivo de transformar la composición étnica del país y así desplazar como mayoría a los grupos tradicionales blancos. Las falsas informaciones han traído también como consecuencia el aumento al apoyo de la construcción del muro y al rechazo de que se abran las puertas a la aplicación de programas como el DACA, compuesto por jóvenes crecidos en el país y que hoy constituyen un grupo capaz de contribuir al desarrollo de la economía del país.
Como hemos reiterado otras veces, nunca hemos estado opuestos a que se regule la inmigración, a lo que nos oponemos radicalmente es, que se usen falsedades, como las expuestas en la referida encuesta, y mecanismos de abusos y maltratos a los derechos de los inmigrantes para controlar la inmigración.
